Más allá del empate de México ante Trinidad y Tobago, la situación más alarmante para el combinado tricolor es la lesión de Hirving "Chucky" Lozano, quien salió retirado en camilla del terreno de AT&T Stadium y se especuló sobre diversos escenarios que llevaban incluso a pensar sobre una lesión que lo mermaría por el resto del año. Sin embargo, la Federación Mexicana de Futbol ya confirmó que si bien no supone una situación de riesgo, causará baja para la Copa Oro y su periodo de recuperación será de entre 4 y 6 semanas.
De acuerdo al médico de su equipo, Napoli SSC, Raffaele Canonico, reveló la gravedad: "Chucky sufrió una lesión sobre su ojo izquierdo. Sin embargo, su condición no es motivo de preocupación. Ya se le sometió a los exámenes y resonancia magnética". Así mismo, se reveló que el conjunto italiano estará en comunicación con la Selección para evaluar al delantero.
Por otro lado, Jorge Thelier, auxiliar del conjunto mexicano dijo en la jornada posterior al cotejo: "Pensamos que había afectado su salud y nos preocupamos como grupo. Ahora estamos mucho más tranquilos al saber que está bien", confirmando las buenas noticias sobre la gravedad de la lesión el canterano de Pachuca.
Minutos antes, Efraín Álvarez, seleccionado y quien de hecho ingresó por Lozano tras su lesión confirmó que fue sometido a una cirugía en Arlington, Texas, lugar donde se disputó el primer partido para el conjunto tricolor que finalizó 0-0 ante Trinidad y Tobago que consiguió su boleto días antes de la contienda, fue quien reveló la cirugía del "Chucky", así como el estado anímico del conjunto tricolor.