Matthew Stafford es una de las figuras a seguir del Super Bowl LVI. El mariscal de campo de los Rams alcanzó su primera victoria en postemporada tras 14 campañas dentro de la NFL y su primer viaje al partido grande en el año en que fue transferido al conjunto angelino proveniente de los Detroit Lions, conjunto que lo seleccionara en la primera posición del reclutamiento colegial en 2009.
Desde su llegada a los Lions parecía la gran esperanza para darle la vuelta a un equipo que previo a su arribo finalizaron con cero victorias y 16 derrotas. Su calidad, junto a la de Calvin Johnson, uno de los mejores receptores de su generación, llevaron a los de Michigan a romper una sequía de 12 años sin postemporada en 2011.
Tras su primer viaje a playoffs, los Lions de Stafford consiguieron dos viajes más, aunque sin éxito y de momento, los Lions son el equipo con la mayor sequía sin una victoria en postemporada tras el éxito de los Cincinnati Bengals, rivales de Stafford en el Super Bowl LVI en SoFi Stadium.
En apenas su primer año con el conjunto de los Rams, Stafford consiguió igualar su mejor campaña en cuanto a pases de anotación se refiere con 41, así como su tercer mejor año con relación a las yardas, gracias a las 4 mil 886 que logró con el conjunto angelino, aunque también tuvo su peor año con relación a intercepciones gracias a asus 17 entregas.
Por otro lado, Stafford, líder pasador histórico de Detroit, es el responsable por las dos mejores temporadas en la historia para receptores, gracias a las mil 964 que consiguió con Calvin Johnson en 2012, así como las 1947 de Cooper Kupp en apenas su primer año con el casco de los Rams.
Ahora, Stafford tiene la oportunidad de salir de un club de grandes mariscales de campo como Dan Marino, Jim Kelly o Fran Tarkenton, quiénes pese a los números que consiguieron a lo largo de sus carreras nunca pudieron formar parte de un equipo de campeonato.