La carrera de Tim Tebow es muy distinta a la de muchos atletas, por ello, cuando se anunció que fue cortado por Jacksonville, a pesar de ser lo esperado, se transformó de inmediato en una noticia de impacto nacional en los Estados Unidos. El carismático atleta ha buscado igualar su éxito colegial en el plano profesional, pero hasta la fecha, está meta lo sigue eludiendo, quizá en lo que ha sido su última oportunidad.
Tebow se convirtió en uno de los QB´s más exitosos de su generación a nivel colegial con los Florida Gators, donde rompió marcas de touchdowns por tierra en la conferencia conocida por sus siglas como SEC. Además, en 2007, ganó el premio Heisman, el galardón individual más importante del futbol americano a nivel universitario. El siguiente paso fue la NFL, donde fue seleccionado con el pick número 15 por los Broncos, donde en 2011 obtuvo la titularidad y llevó al equipo a playoffs, donde el equipo ganó su primer partido de postemporada desde 2005.
Sin embargo, a pesar del impacto inmediato sobre el campo y su gigantesco éxito con los aficionados fuera del emparrillado, fue intercambiado a los New York Jets en 2012, equipo que lo cortó al termino de la campaña. Tebow probó suerte con Patriots y Eagles, pero no vio acción con ninguna de las dos franquicias.
Con ello, Tebow decidió cambiar de deporte al más puro estilo de Michael Jordan y firmó un contrato de Ligas Menores con los New York Mets. El antiguo mariscal de campo se convirtió en jardinero izquierdo y bateador designado con las novenas de Scottdale, St. Lucie, Columbia, Binghamton y Syracuse, este último en la clase AAA, el último paso antes de las Grandes Ligas. Sus números totales en la organización fueron de 18 home runs, 107 carreras producidas, 210 hits, 48 dobles, 3 triples, 107 carreras anotadas, 5 bases robadas y un promedio de bateo de .223, además, participó en cuatro diferentes entrenamientos de primavera con el equipo de los Mets, con solo un cuadrangular en 34 partidos.
Finalmente, Tebow recibió una oportunidad con los Jaguars para probarse como ala cerrada, una posición nueva para él, por lo que la decisión generó muchas dudas. Sin embargo, el atleta de 34 años solo vio tiempo de juego en un partido de pretemporada antes de ser dejado en libertad por la franquicia de Jacksonville. Fuera de las canchas ha trabajado como analista para ESPN en partidos de futbol americano colegial en los Estados Unidos.