Sergio Pérez de Red Bull y toda la parrilla tuvo que esperar más de una hora para comenzar el Gran Premio de Singapur, puesto que la lluvia provocó un retraso importante en el inicio de esta carrera en el Campeonato Mundial de la Fórmula 1.
Checo Pérez arrancó en el segundo lugar por detrás de Charles Leclerc de Ferrari, pero una gran maniobra al comenzar las acciones le permitió ponerse adelante del monegasco, puesto que mantuvo hasta la vuelta
Sin embargo, un accidente de Zhou Guanyu de Alfa Romeo con Nicholas Latifi de Williams, provocó que el Safety Car entrará a la pista en la vuelta 9, dejando de lado cualquier ventaja que tenía el mexicano en esta carrera.
Este fue el gran rebase de Checo Pérez a Charles Leclerc en el GP de Singapur:
Sin embargo, cerca del final de la carrera, Checo Pérez informó a sus ingenieros que sentía problemas con el RB18, por lo que se pusieron en marcha para arreglar este problema, mientras el mexicano estaba defiendo la posición ante Charles Leclerc.
El monegasco estuvo apretando y atacando en cada momento, pero cuando restaban 15 minutos para finalizar la carrera (esta se definió por tiempo y no por vueltas), la escudería austriaca logró resolver el problema y el tapatío comenzó a poner distancia entre su perseguidor.
Checo Pérez hizo gala de su gran manejo de los neumáticos y con su estrategia logró vencer a su rival, quien se quedó a cinco segundos, distancia que puso el mexicano para mantener un margen en caso de que lo penalicen por un adelantamiento ilegal con el Safety Car.
El mexicano condujo perfectamente y se llevó el podio con un gran rendimiento en esta edición del GP de Singapur.
