La histórica introducción del BMX freestyle llegaría en los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020, luego de surgir en la competencia por excelencia de los deportes extremos en la década de los 90, los X Games, pasaría a estar dentro de la Unión Ciclista Internacional en 2016, otorgándole legitimidad al deporte y lo que le brindaría una oportunidad a todos los riders afiliados para competir en el circuito de la Copa del Mundo, en el 2017 fue confirmado como deporte olímpico junto a la disciplina del Surf, la escalada deportiva, el baloncesto de 3 vs 3 y el skateboarding.
La del Reino Unido, Charlotte Worthington ha hecho historia tras convertirse en la primera campeona olímpica en BMX Freestyle este domingo en el Parque de Deportes Urbanos de Ariake en Tokio, superando en la final a la gran predilecta, la estadounidense Hannah Roberts, que se quedó con la medalla de plata, mientras tanto que la suiza Nikita Ducarroza se llevo el bronce.
Las primeras medallas fueron entregadas en el Parque Deportivo Urbano de Ariake en el día 9 de competición de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
La chilena Macarena Pérez Grasset, única participante latinoamericana en la prueba femenina, acabó en el octavo lugar de las nueve participantes, por lo que obtuvo un meritorio diploma Olímpico
Con un increíble ejercicio en el segundo 'run', incluyendo una voltereta hacia atrás con giro de la bicicleta en el aire (un 'backflip 360º), un truco innovador en esta competencia en Tokio, que ninguna otra dama había realizado hasta ahora, Worthington obtuvo una puntuación de 97,50 y excedió los 96,10 puntos de Roberts, la triple campeona mundial de la especialidad, en la primera manga.
A diferencia del sábado, en la que la clasificación para la gran final fue definida por la media de dos puntuaciones logradas, en la final solo contaba la mejor, por lo cual las 'riders' arriesgaron mucho más y muchas de ellas terminarían cayendo al suelo.