El 29 de mayo de 1966, a las 12 del día, la historia del fútbol mexicano y mundial cambió para siempre. América y el Torino de Italia inauguraban el Estadio Azteca frente a 110 mil espectadores, un ambicioso proyecto que permitió a México entrar en la escena del balompié global. Finalmente, 54 años después, el "Coloso de Santa Úrsula" cambiará de nombre.
Sede de los Juegos Olímpicos de 1968, de los Mundiales de 1970 y 1986, incluyendo el llamado "Juego del Siglo" entre Italia y Alemania, en el Azteca entraron al olimpo del fútbol los dos más grandes jugadores de todos los tiempos, Diego Armando Maradona y el Rey Pelé.

El inmueble ubicado en la demarcación de Tlalpan, Ciudad de México, es sede hoy en día de los partidos de América, Cruz Azul y la Selección Mexicana. Después de sendas remodelaciones, su capacidad se vio reducida a 87 mil espectadores, sin embargo continúa siendo el estadio con mayor aforo del país y está a punto de sufrir una modernización más, que alterará su nombre por motivos comerciales.
Remodelación rumbo al Mundial 2026
México albergará, en conjunto con Estados Unidos y Canadá, la Copa Mundial de 2026 y el Estadio Azteca ya se prepara para ponerse a la altura de las exigencias de la FIFA. Días atrás, se dio a conocer que el inmueble vivirá una remodelación más, esta vez con el fin de modernizar los alrededores y convertir la visita de los aficionados en una experiencia más completa que solo un partido de fútbol.
En esa línea, los propietarios trabajan de cerca con la FMF para la construcción de un centro comercial y un hotel, que estará conectado directamente a los vestuarios del "Coloso" por túneles y permitirá hospedarse a los equipos locales y visitantes, ahorrando tiempos de traslados. Además, el edificio también ofrecerá su servicio a civiles y aficionados que quieran quedarse allí.
Cambio de nombre, una realidad
El ambicioso proyecto que busca mantener a la Ciudad de México como una de las tres sedes del país, junto con Monterrey y Guadalajara, tendrá un costo elevado, por lo que Grupo Televisa está dispuesto a ofrecer el nombre a alguna empresa comercial, como sucede en muchos estadios de Estados Unidos y Europa.
Si bien todavía no se revela quiénes estarían interesados en invertir, es una realidad que para una compañía resulta atractiva la idea de ver su nombre en uno de los inmuebles más emblemáticos del mundo, que además de ser sede de dos de los equipos más importantes del país, albergará su tercera Copa Mundial en 5 años más.

El curioso origen de su nombre
El Azteca, diseñado por el arquitecto Pedro Ramírez Vázquez, tuvo un proceso curioso para obtener su nombre, en el que la idea fue involucrar a la ciudadanía. A través de un concurso muy difundido en los años 60, los aficionados de toda la República fueron invitados a elegir el nombre del inmueble a través del servicio postal mexicano.
La organización del certamen elegiría el apodo que tuviera el mayor número de propuestas, que fue justamente "Estadio Azteca". Para seleccionar al ganador, se tomó en cuenta quién fue el primero en hacer llegar su carta y el afortunado fue el señor Antonio Vázquez Torres, oriundo de León. El guanajuatense recibió, como premio por su contribución, dos asientos de plateas con vigencia de 99 años.