Meghan Markle y el príncipe Harry, una vez más están envueltos en la polémica, luego de que se diera a conocer que registraron como marca el nombre de su hija recién nacida, Lilibet Diana Mountbatten-Windsor para poder lucrar con ella.
De acuerdo con diversos medios de comunicación, existen dos registros como marca con los nombres Lilibet Diana y LiliDiana, lo que significa que en algunos años podrían ser utilizados para que sus padres lo usen con fines comerciales.
Cuando en su momento, el príncipe Harry y Meghan revelaron el nombre de su hija se les cuestionó si le habían pedido permiso a la reina Isabel II de usarlo, ya que es su segundo nombre y con el que el príncipe Felipe de Edimburgo la llamaba de cariño.
Para aclarar dicha situación Harry dijo que habló con su familia antes de anunciar el nombre de su hija, y aclaró que su abuela fue la primera en saberlo.
¿Por qué surge la polémica?
Lilibet Diana lleva ese nombre en honor al segundo de la reina Isabel II y por la princesa de Gales, madre de Harry y William.
La polémica surge porque inmediatamente después de que los duques de Sussex anunciaran el nacimiento de su hija, el pasado 4 de junio en el hospital de Santa Bárbara en California, Estados Unidos, se encontraron dos registros con el nombre.
El 8 de junio se registró el dominio lilibeth-diana.com; mientras que Lily diana.com fue registrado desde el 31 de mayo de este mismo año.
Aunque se ha señalado a la pareja como responsables de querer lucrar con los nombres de sus hijos, se sabe que hicieron lo mismo tras el nacimiento de su hijo Archie.
Los dominios registrados de su primer hijo fueron hechos el 24 de febrero del 2020 y su primogénito nació el 6 de mayo del 2019.
Con ello la pareja evitó una futura recompra más cara del dominio y se aseguró de poder utilizar ese nombre en internet con fines filantrópicos o comerciales.