Este día se disputó la gran final de la Champions League en el Stade de France entre el Liverpool y el Real Madrid, donde los Reds dominaron el primer tiempo, pero esta parte del encuentro se vio enmarcada por un polémico fuera de lugar al final de los 45 minutos de Karim Benzema.
Cuando este primer tiempo estaba por llegar a su desenlace, con un gran contragolpe del conjunto blanco que techo a la defensiva del Liverpool, mismo que recibió dentro del área el delantero francés y tras una serie de rebotes mandó el balón al fondo del arco de Alisson.
Sin embargo, esta anotación fue sometida a revisión del VAR y tras varios minutos fue anulada la anotación, dejando esta gran final empata en el primer tiempo.