La imagen que se muestra en monografías, libros de texto, billetes de mil pesos, estaciones del Metro, y todo tipo de carteles de la Independencia de México, sobre una persona de la tercera edad, con calva en el centro, pero con cabello largo a los costados, de mirada tierna y rasgos europeos, podría no ser el verdadero Miguel Hidalgo.
También llamado "El Padre de la Patria", don Miguel Gregorio Antonio Ignacio Hidalgo y Costilla y Galaga Mondarte Villaseñor, mejor conocido como Miguel Hidalgo, no es la persona que nos enseñaron desde la primaria, sino que podría ser un botánico, amigo de Joaquín Ramírez, el pintor oficial de la corona mexicana cuando Maximiliano de Habsburgo usurpó el Poder.
De acuerdo con el canal de YouTube “Migala”, como nadie reconocía a Maximiliano como el nuevo emperador de México, a un año de su desembarque en el Puerto de Veracruz, el austriaco pidió a Joaquín Ramírez en 1865, hacer un retrato de Miguel Hidalgo, esto con el fin de ganar legitimidad entre las personas y conmemorar los 55 años del comienzo de la Independencia.
Aquí comenzó la complicación de todas las imágenes que nos han vendido como el Miguel Hidalgo, y es que en el siglo XIX las fotografías no existían, y los retratos al óleo sólo se hacían para los personajes “más importantes” de la época, como generales, gobernadores, obispos y virreyes.
La complicación que tenía “El Padre de la Patria” para no ser retratado es que era un cura de parroquia, que tenía ideas revolucionarias para su época, además de que cuando comenzó la guerra de Independencia, el Gobierno de la Nueva España prohibió durante 10 años hablar de Miguel Hidalgo y sus ideas; regla que si no se cumplía tenía consecuencias fatales, como ser ejecutado.
Según “Migala”, Joaquín Ramírez acudió a Guanajuato y preguntó a las personas sobre si alguien tenía alguna referencia del Cura Hidalgo, pero habían pasado más de 50 años de la muerte del “Padre de la Patria”, por lo que le fue casi imposible tener alguna referencia fidedigna. Sin embargo, para no quedar mal con el emperador de México, le pidió a un amigo suyo, que era un botánico alemán, posar para que fuera la imagen de Miguel Hidalgo, retrato que se sigue reproduciendo desde entonces y hasta la actualidad.
¿Quién es el verdadero Miguel Hidalgo?
El único retrato de Miguel Hidalgo que le hicieron en vida es el de una estatuilla que se exhibe en el Castillo de Chapultepec, y que según se narró en el canal de YouTube, mismo que retoma una publicación del 16 de septiembre de 1900 del diario El Imparcial, la hizo un imaginario de Querétaro después de que los insurgentes ganaron la batalla del Monte de las Cruces.
En las imágenes compartidas en el video, se ve a un Miguel Hidalgo moreno y con nariz ganchuda, un retrato diferente al que la historia nos ha puesto en nuestro imaginario colectivo.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), "la estatuilla de Hidalgo, fue atribuida a Clemente Terrazas, de quien se decía que era compadre de Hidalgo. Ciertamente, el verdadero origen de esta pieza es un misterio, pues décadas más tarde se atribuyó a otro autor y a otro período, sin embargo, las técnicas usadas apuntan a que haya sido elaborado efectivamente en los años de la insurgencia, por lo que es probable que nos acerque un poco al héroe".
El INAH también destaca que "es precisamente a estos artistas gremiales a los que se deben los pocos retratos conocidos y producidos cuando los caudillos insurgentes aún vivían o en los años inmediatos a su muerte".
