Una de las características que pueden describir los signos zodiacales es la pasión que tienen las personas en sus relaciones amorosas, esto podría ser simplemente un "magnetismo sexual" o por mantener viva la llama del amor.
De acuerdo con la astróloga Sophia Pérez (@esophterica), consultada por el periódico El Espectador, estos signos pueden llevar la pasión de una manera desbordada fuera y dentro de la cama:
Aries: En las relaciones de pareja, los Aries disfrutan de conocer a sus conquistas en la cama y les encanta ser los líderes en ese aspecto, debido a que lo rige el fuego.
Según la astróloga, las personas nacidas en este signo son apasionados, pero se pueden cansar rápido si las cosas se vuelven rutinarias y monótonas, por lo que les encanta mezclar pasión con libertad, aunque se retirarán si se sienten atrapados.
Leo: Conocidos por ser "amantes del amor", que mezclan romance con lujuria, porque son, al igual que los Aries, regidos por el fuego, pueden ser parejas bastante intensas, pues no quieren desaprovechar un solo segundo con sus conquistas.
Los Leo son apasionados y disfrutan del riesgo y la adrenalina, así que cualquier experiencia con estas personas será toda una aventura.
Libra: Estas personas conquistan con dulzura y romance, pero que no se confunda con no ser apasionadas, todo lo contrario. Según la astróloga es un signo que posee un "magnetismo sexual", debido que al combinar su ternura con su pasión se vuelven la mezcla perfecta para avivar la llama del amor con sus parejas.
Cáncer: Son personas muy apasionadas y disfrutan conectar con sus parejas a través del sexo, aunque no lo pareciera. Les encanta que sus parejas sientan ese mismo deseo.
Las personas nacidas bajo este signo zodiacal pueden llegar a ser muy ardientes, pese a que se toman su tiempo para conquistar y concretar sus relaciones.
Capricornio: Para darle "rienda suelta" a toda su energía inagotable, los capricornio deben estar seguros de que ya están en una relación estable porque son amantes muy pasionales, creativos, y audaces a la hora de crear escenarios ardientes.