Maria Levy, quien es una joven y talentosa fotógrafa es la hija de la fallecida, Mariana Levy y a 16 años de su partida, compartió su sentir acerca del proceso que ha llevado tras esta difícil perdida, pero señaló que busca salir adelante.
La hija de la actriz, fue entrevistada por Rosario Murrieta en "Ventaneando" de TV Azteca, tras conmemorarse un año más del sensible fallecimiento de su madre, Mariana Levy. Sin embargo, explicó que su abuela le dijo una frase que le ha ayudado a superar poco a poco esta situación.
"Algo que dice mi abuela, que es muy sabio como ella, dice: 'El dolor no lo eliges, pero el sufrimiento sí'", comentó.
Asimismo, señaló que todo proceso es doloroso, pero ahora ella transformó el mismo en un impulso para seguir y no quedarse en el pasado.
"Todos pasamos por situaciones de dolor y ese dolor es nuestro y está bien, simplemente es, fue y siempre será. Hacerlo parte de nosotros, pero que nos ayude como un impulso para seguir adelante, no identificarnos con el dolor en el pasado, estar muy en el presente y decidir no sufrir", mencionó.
Por otro lado, explicó que ella trata de ver lo positivo de las cosas, ya que siempre existen situaciones que por muy difíciles que sean no se pueden cambiar, pero se puede transformar como uno mismo las siente.
"Me gusta quitarle la connotación negativa a las cosas. Es un dolor que nunca voy a dejar de sentir, que ahí está, que es mío, pero ya decidí no sufrir", agregó.
¿Cuál es la mejor forma de honrar a Mariana Levy?
Por último, Maria Levy explicó que ella busca honrar a su madre, continuando con su vida y "seguir creciendo, y buscar mi paz interior, rodearme de amor y mucha alegría".
Además, explicó que aunque vivirá siempre con el dolor de perder a Mariana Levy, sabe que no durará para siempre y buscará ser feliz.
"Te quitan una parte de ti, claro que es doloroso, pero no hay cosa más natural que la muerte. Es entender que nada dura para siempre, la vida trata de cambios. Y tenemos de dos sopas: o tomar la decisión de identificarnos con ese dolor y quedarnos estancados ahí y justificar todo nuestro malestar, o decir 'sí, es mi dolor, y voy a honrar a esta persona siendo muy feliz'", concluyó.
