Fue en el 2016 cuando Gabriel Soto interpuso una millonaria demanda contra una revista mexicana, tras la publicación de unas fotos donde se le veía cargando a Marjorie de Sousa en la playa.
En aquellos momentos esa imágenes fueron las cuasantes de un evidente distanciamiento entre su en ese entonces esposa Geraldine Bazán y él. Tiempo después se comenzó a especular que el hijo que Marjorie de Sousa esperaba, era de él lo que complicó mucho más las cosas e incluso, Geraldine Bazán confesó en uno de sus videos de Youtube que cuando se publicaron esas fotografías Gabriel Soto salió de su casa por un tiempo, pues la relación se quebrantó.
En ese año cuando medios lo cuestionaban sobre ua posible infidelidad de su parte con Marjorie de Sousa, Gabriel Soto aceptó que hubo infidelidades por su parte anteriormente, sin embargo, negó rotundamente haber tenido relaciones sexuales con Marjorie de Sousa.
El seguir lucrando con su imagen y difamándolo será un problema bastante costoso para la revista, pues según el abogado de Gabriel Soto, Gustavo Herrera, la compensación económica que recibirá luego de ganar recientemente una primera demanda, podría llegar hasta 60 millones de pesos mexicanos.
Además de haber procedido legalmente, Gabriel Soto se abrió respecto al tema y en una conversación con Mara Patricia Castañeda, platicó qué fue lo que realmente pasó con su en ese entonces compañera de trabajo:
“Nunca tuve nada que ver con Marjorie de Sousa. Si cometí un error al cargarla, pero a ver yo práctico artes marciales mixtas y esa es una cargada de lucha. La foto demuestra lo contrario, o sea ella en bikini en la playa, estuvo mal, yo era un hombre casado o sea mal.
Si yo hubiera tenido algo que ver con ella la verdad no lo hubiera hecho en una playa pública, hay que usar el sentido común. Me estaría escondiendo no estaría ahí en frente de todos”
