La reina Isabel II se encuentra preocupada y se lo ha manifestado al príncipe William. Su Majestad tiene temor por la seguridad de su familia, en específico por la de su nieto, por lo que le pidió dejar de volar en helicópteros.
A la monarca de 95 años le preocupa el futuro del rey y su familia, ante la posibilidad de un accidente. En especial, porque no se ha respetado el protocolo que impide que miembros de la realeza vuelen juntos. Una regla que se relajó, luego de que el príncipe William divide su tiempo entre Londres y Norfolk, donde está su casa.
"Su Majestad le ha dicho a amigos cercanos y cortesanos que le gustaría que William dejara de volar él mismo, particularmente con mal tiempo, ya que los helicópteros no son los más seguros forma de transporte", reveló una fuente según The Sun.
Una preocupación que se da pese a que el hijo del príncipe Carlos es un avezado aviador que sirvió como piloto de búsqueda y rescate de la RAF por cinco años.
La misma fuente aseguró que la reina Isabel "sabe que William es un piloto capaz, pero no cree que valga la pena correr el riesgo de que los cinco sigan volando juntos y no se imagina lo que sucedería".
Además, el informante compartió una particular confesión de la cabeza de la realeza británica, quien estaría encantada con "la forma en que William y Kate han enfrentado el desafío en los últimos años y sabe que la monarquía está a salvo en sus manos".