Fue prisionera de su propio padre por 13 años, y Britney Spears, quien ahora es libre, confiesa estar aterrada, porque no quiere equivocarse. Eso lo dejó saber en su Instagram
"Seré honesta y diré que he esperado tanto tiempo para salir de la situación en la que estoy ... ¡¡y ahora que está aquí tengo miedo de hacer cualquier cosa porque tengo miedo de cometer un error. Durante tantos años, siempre me dijeron que si tenía éxito en las cosas, podría terminar ... ¡¡¡y nunca lo hizo !!! Trabajé muy duro, pero ahora que está aquí (la libertad) y cada vez más cerca del final, estoy muy feliz, pero hay muchas cosas que me asustan", escribió en Instagram
"Los paparazzi corren a través de los árboles y en la carretera cuando conduzco a casa y es espeluznante y tengo que conducir por una escuela primaria ... los niños son un gran problema ... ¡Pero yo también! No me gusta que intenten asustarme y saltar como lo hacen... es como si quisieran que haga una locura".
Contó que apenas hace 4 meses obtuvo las llaves de su auto, tras 13 años de estar vigilada, incluso hasta en su habitación y sin poder decidir nada por ella misma.
"No he hecho nada para que me traten como lo han hecho durante los últimos 13 años ¡Estoy molesta con el sistema y desearía vivir en otro país! Estoy celebrando la Navidad a principios de este año ¿por qué no? Creo que cualquier motivo para encontrar más alegría en la vida es una buena idea".
Aseguró que ahora hará las cosas muy diferentes, que se mantendrá alejada del negocio y pidió por las almas de sus familiares cuando comience a dar entrevistas. Terminó enviando bendiciones.
“Dios los bendiga a todos”.
Britney Spears vivió 13 años bajo la tutela de su padre James Parnell Spears, ya que sus conductas no eran apropiadas y temían por su bienestar. Pero su padre la volvió una esclava, no le permitía tomar decisiones, la monitoreaba las 24 horas y controlaba todos sus actos.
Este año por fin logró que su padre dejará la tutela y desea tener una vida más normal.
