En la antesala del Gran Premio de Turquía y posterior a la prueba de Monza, el 2026 se ha convertido en uno de los focos de discusión para la Fórmula 1, particularmente en cómo generar una unidad de potencia que se adapte a las necesidades de la categoría sin afectar el plan de medio ambiente, ni la economía de los equipos.
En torno a este tema, Toto Wolff, director de la escudería Mercedes, habló sobre las renuncias a las que estaría dispuesto a hacer el conjunto, particularmente del MGU-H, elemento que se utiliza para recuperar energía para el turbocompresor del monoplaza y que ha sido una de las grandes ventajas para el equipo que ha conquistado los últimos siete campeonatos de escuderías.
"El MGU-H va a ser eliminado si podemos combinar una alineación de muchos otros puntos", comentó Wolff acerca de la nueva composición de los motores de Fórmula 1 que buscan para 2030 dejar de generar emisiones de carbono para tener una competencia amigable con el medio ambiente.
Así mismo, confirmó que la marca compatriota de Mercedes, Volskwagen, a través de Porsche o Audi puedan ingresar a la F1: "Creo que es un compromiso que, de momento no puedo hablar por nadie más, pero en Mercedes estamos dispuestos a tomar las elecciones pertinentes para facilitar la entrada del Grupo Volkswagen".
Pese al apoyo, Wolff dijo que no depende únicamente de las "saetas plateadas", sino del circuito: "Sin embargo, hay otras temáticas en los que tenemos que encontrar un compromiso. Y si no se puede encontrar un compromiso, entonces probablemente volveremos a la gobernanza y tendremos un reglamento de 2026 que la FIA y la FOM van a presentar".