La liga de Bélgica tuvo un cierre de infarto y el Royal Antwerp se proclamó campeón después de 66 años de sequía, y todo gracias a un agónico golazo de Toby Alderweireld. El ex defensa del Atlético de Madrid y Tottenham apareció a los 94 minutos con un remate al ángulo desde fuera del área para anotar el 2-2 definitivo ante el Genk, que hasta ese momento estaban quedándose con el título, y darle la copa a su equipo, que la última vez que festejó fue en 1957. Como era de esperarse, todos festejaron eufóricamente el histórico tanto del mundialista en Brasil 2014, Rusia 2018 y Qatar 2022.