Héctor Parra ha estado en el foco desde hace unas semanas, luego de su aprehensión debido a las acusaciones por parte de su hija menor Alexa, fruto de la relación que el actor tuvo con la también actriz Ginny Hoffman.
Recientemente, el actor conocido por su participación en múltiples capítulos de "Lo que callamos las mujeres", envió una carta al programa "Ventaneando" en la que suscribió algunas palabras, pidiendo a su hija que diga la verdad, así como un determinante mensaje a Sergio Mayer, quien ha apoyado severamente a la acusadora.
En la carta de Héctor Parra, se puede leer en un principio: "En tus manos está, hija mía, acabar con esta farsa en la que todos perdemos. Te suplico busques en tu corazón honestidad, fuerza y valores morales, que estoy seguro hay dentro de ti. Te he amado, te amo y te perdono".
Así como puntualizó todos los malestares que lo han agobiado desde que está en la cárcel: "Ansiedad, dolores de cabeza, contracturas por estrés, diarreas, insomnio, un resfriado por enfriamiento que hasta ahora no termina por desaparecer. Bajas de presión. Se me ha atendido en tiempo y forma. De igual manera me apoyan en psiquiatría".
"Creo en la justa justicia y no sólo espero: yo debo estar en libertad ante la evidente mentira de mi caso. Jamás, ni en las peores pesadillas, imaginamos algo así, algo tan bajo, mezquino y vil. Jamás creí que la traición viniera de mi propia sangre", aseveró.
Sin embargo, el actor reafirmó su libertad: "Hoy, más que nunca, esta injusticia, lejos de derrumbarme, me hace mucho más fuerte día a día, insisten en apagarme, pero cada vez encuentro más fuentes de energía".
Héctor Parra manda contunde mensaje a Sergio Mayer
Desde un inicio, la hija mayor de Héctor Parra, quien ha expresado su apoyo y cariño al actor, acusó a Sergio Mayer de tráfico de influencias por apoyar abiertamente a Ginny Hoffman en el proceso.
Al tanto, Héctor Parra, escribió en su carta: "Al señor Sergio Mayer le deseo, sin afán de entrometerme en asuntos personales que obviamente desconozco, que espero nunca pise la cárcel, ni un sólo día de los 31 que yo llevo aquí".
Y concluyó: "Ya que para ello se requiere: valor, temple, garra, tener los pies firmes, bien enraizados a la tierra, el frente muy en alto y no tener que bajar la mirada ante nada ni ante nadie, y menos por calumnias tan burdas, bajas y viles. Se necesita ser hombre de una sola pieza".