La reina Isabel está de cumpleaños y aprovechó de pensar en su difunto esposo, el príncipe Felipe. En un nuevo mensaje, difundido por el Palacio de Buckingham el día miércoles, la monarca dijo que ella y su familia se han sentido "profundamente conmovidos" por los tributos rendidos a Felipe en los días posteriores a su fallecimiento el 9 de abril.
"Hoy, con motivo de mi 95 cumpleaños, he recibido muchos mensajes de buenos deseos, que agradezco mucho. Si bien como familia estamos en un período de gran tristeza, ha sido un consuelo para todos ver y escuchar los tributos que se le rinden a mi esposo, de parte del Reino Unido, la Commonwealth y de todo el mundo", escribió.
"Mi familia y yo queremos agradecerles a todos por el apoyo y la amabilidad que nos han mostrado en los últimos días. Nos ha conmovido profundamente y seguimos recordando que Philip tuvo un impacto tan extraordinario en innumerables personas a lo largo de su vida", añadió. Ella firmó la carta, que escribió desde el Castillo de Windsor, como "Elizabeth R.".
Es la primera vez que hace una declaración pública sobre el príncipe Felipe desde su funeral el sábado pasado. El mundo vio cómo la reina se sentaba sola en la Capilla de San Jorge, separada de su familia inmediata debido a los continuos requisitos de distanciamiento social de Covid-19.
Con la cabeza inclinada, contempló los casi 100 años de vida de su esposo y su propio matrimonio de 73 años y luego vio cómo su ataúd bajaba lentamente a la bóveda real. La reina está pasando su cumpleaños "en privado" en el Castillo de Windsor y no comentarán si tendrá algunas visitas socialmente distanciadas de su familia.