Celebridades

De Alejandra Guzmán a Michelle Renaud: ellas arriesgaron su vida en una cirugía

Aún padecen las consecuencias de haberse quitado grasa, aumentado sus bubis o sus glúteos

Las estrellas siempre se preocupan por su físico, la belleza y mantener la figura, así que las cirugías y tratamientos estéticos están a la orden del día.

Pero pocos hablan de las operaciones que por poco y les cuestan la vida. Aquí te presentamos casos donde ya nada fue igual, pero ¡lo bueno es que la pudieron contar!

Esta vedette de los años 70 siempre encantó por sus rasgos asiáticos y su cuerpo escultural, pero todo cambió cuando se hizo un tratamiento en los pómulos. Jamás imaginó que le pondrían aceite, destruyendo su cara. Con el tiempo ha aprendido a sobrevivir así, pero nunca volvió a ser la misma y sólo agradece seguir viva.

A pesar de que siempre tuvo un gran cuerpo por el ejercicio que hacía, Alejandra Guzmán quería tener más grandes las pompas y en 2012 se sometió a un procedimiento estético donde le inyectaron una sustancia llamada metil metacrilato en los glúteos, la cual se le incrustó en la piel y le generó polímeros en la cadera que no la dejaban caminar. Da gracias de haber salvado su vida, pero le ha costado 40 operaciones y que terminara con una cadera de titanio.

Cuando ingresó al mundo del espectáculo, hace poco más de 9 años, Michelle se sentía plana de su busto y decidió ponerse implantes, pues le aseguraban que era algo sano y sin consecuencias. Hace siete años comenzó a presentar acné severo, manchas blancas en la piel, colitis, mareos, resequedad en la piel, y no sabía por qué. Hace un año se le reventó un implante y lo cambió, pero eso no mejoró sus síntomas. Después decidió quitárselos, al darse cuenta que el relleno del implante se le había regado por la piel. Ahora se siente perfectamente bien, pero con miedo, ya que su mamá murió de cáncer de mama y cree muy probable que lo haya desarrollado por implantes.

Hace 16 años Lorena Herrera decidió inyectarse colágeno en los labios, pero jamás imaginó que se le deformarían, que le saldrían bolas y heridas, las cuales se pudo ir retirando, pero su boca jamás volvió a verse bien.

Hace 24 años, Lucha Villa, una grande de la música vernácula, triunfaba y su voz era inigualable, pero pasaba por un divorcio, así que decidió quitarse la grasa de los brazos y el abdomen. Lo que no esperaba es que en plena cirugía de liposucción le diera un infarto y la falta de irrigación sanguínea la dejó muy grave. Después terminó con parálisis facial y perdió el habla. Ese fue el fin de su carrera y, aunque ahora tiene 84 años de edad, quedó en silla de ruedas y jamás volvió a ser la misma.

Tags