Jelena Djokovic se expresó por primera vez desde que Novak quedó varado en Australia a la espera de recibir una visa. La esposa del tenista número uno del ranking mundial de la ATP se pronunció a través de sus redes sociales para agradecer los mensajes de apoyo para el actual campeón del Australia Open, al tiempo que pidió que el mundo se guíe por las leyes del amor, a la espera que el 20 veces ganador de Grand Slam reciba el permiso para ingresar a Melbourne.
"¡Feliz Navidad a todos los que la celebran hoy! ¡Paz de Dios!. Mis deseos son que todos estén sanos, felices, seguros y juntos con sus familias. Me gustaría que mi familia estuviera junta hoy, pero me reconforta saber que al menos estamos sanos. Y creceremos a partir de esta experiencia.
Gracias queridas personas de todo el mundo por usar su voz para enviarle amor y apoyo a mi esposo. Respiro profundamente para calmarme y encontrar gratitud (y comprensión) en este momento por todo lo que está sucediendo. La única ley que todos deberíamos respetar en todas las fronteras es el amor y el respeto por otro ser humano. El amor y el perdón nunca son un error, sino una fuerza poderosa. ¡Les deseo a todos lo mejor!", expresó Jelena a través de su cuenta de Instagram.
Djokovic había obtenido una exención médica para participar en el Australia Open, pero a su arribo al aeropuerto de Melbourne fue detenido y su visa cancelada, por lo que fue enviado a un hotel, a la espera de que se resuelva su apelación y pueda defender su título en la pista.
La situación ha provocado la molestia del gobierno serbio, quienes han exigido un mejor trato para Djokovic, mientras que el padre del tenista ha declarado que su hijo es el nuevo líder del mundo libre y lo comparó con Jesucristo.
