En las semanas posteriores al cierre de la campaña 2021 de la Fórmula 1, la llegada de un nuevo motor volvió a cobrar relevancia ante la reunión de Volkswagen con la nueva mesa directiva de la Federación Internacional del Automóvil encabezada por Mohammed Ben Sulayem de cara a la nueva normatividad en 2026.
Tras dar una entrevista al portal Car and Driver, el CEO de la firma alemana Markus Deusmann confirmó que continúa el plan del retorno a la categoría, aunque podría darse bajo dos proyectos de marcas pertenecientes al corporativo: Audi o Porsche. De momento, los "cuatro aros" lucen como la mejor opción posible.
En torno a este tema, Toto Wolff, director de la escudería Mercedes, habló sobre las renuncias a las que estaría dispuesto a hacer el conjunto, particularmente del MGU-H, elemento que se utiliza para recuperar energía para el turbocompresor del monoplaza y que ha sido una de las grandes ventajas para el equipo que ha conquistado los últimos siete campeonatos de escuderías.
"El MGU-H va a ser eliminado si podemos combinar una alineación de muchos otros puntos", comentó Wolff acerca de la nueva composición de los motores de Fórmula 1 que buscan para 2030 dejar de generar emisiones de carbono para tener una competencia amigable con el medio ambiente.
Así mismo, confirmó que la marca compatriota de Mercedes, Volskwagen, a través de Porsche o Audi puedan ingresar a la F1: "Creo que es un compromiso que, de momento no puedo hablar por nadie más, pero en Mercedes estamos dispuestos a tomar las elecciones pertinentes para facilitar la entrada del Grupo Volkswagen".
Pese al apoyo, Wolff dijo que no depende únicamente de las "saetas plateadas", sino del circuito: "Sin embargo, hay otras temáticas en los que tenemos que encontrar un compromiso. Y si no se puede encontrar un compromiso, entonces probablemente volveremos a la gobernanza y tendremos un reglamento de 2026 que la FIA y la FOM van a presentar".