Si estás en busca de emprender un negocio y no encuentras la fórmula para llevarlo a cabo, posiblemente esta información te motive, y es que una mujer ecuatoriana se gana la vida quitando piojos a familias millonarias, celebridades, modelos y hasta familias de ex presidentes estadounidenses.
Se trata de Eliana Ortega, de 36 años, quien llegó en compañía de su hija de 8 años a Nueva York, Estados Unidos, en 2014, para buscar, como la gran mayoría de latinos, el llamado "sueño americano".
Un año después, y luego de tener tres trabajos al día y de pasar meses difíciles con su hija, una compañía de tratamientos contra piojos la contrató; esto porque buscaba desesperadamente empleados porque tenía exceso de trabajo ante un brote que suele ocurrir tras las fiestas navideñas y el regreso de los niños a las aulas.
"Me pareció algo curioso al principio, porque jamás había escuchado que sacar piojos era un trabajo. Cuando era niña en Ecuador era mi mamá quien me los quitaba", contó la madre soltera a Telemundo, y aseguró que el salario la animó a decidirse. "Se me abrieron los ojos así (alza las cejas) y dije: 'Empiezo ya. Ahorita'".
¿Cuánto se puede ganar por quitar piojos?
Eliana Ortega aseguró que en ciudades como Nueva York, el tratamiento para piojos suele costar, como mínimo, 800 dólares por persona, y en su canal de YouTube aseguró que puede hacer hasta 2,500 dólares en un día, un poco más de 50 mil pesos mexicanos.
La ecuatoriana dijo que los piojos son menos racistas y clasistas que las personas infectadas, porque atacan a pobres y ricos por igual. "Una vez le saqué piojos a una hija de un expresidente de Estados Unidos y a sus nietas", contó.
"Ocho años atrás me habría desmayado, pero (los traté) normal, como a cualquier cliente, con respeto y educación. No les hice notar que estaba asombrada, más bien me puse en la posición de experta. Ellos me contrataron por una razón y, mientras estoy sacando piojos, yo soy la que manda. Puede ser la hija del presidente o quien sea", agregó la mujer y detalló que su trabajo es muy discreto, pues la mayoría de las celebridades, familias millonarias o modelos que atiende, no les gusta hacer público que tienen piojos.