Una persona de la tercera edad se suicidó luego de saber que tenía una enfermedad terminal y tomó la decisión de envenenar a sus 13 perros para no dejarlos solos en su casa del municipio de Oxkutzcab, Yucatán.
A Mauricio E.B., de 76 años, le fue diagnosticado cáncer terminal, por lo que tuvo que tomar una difícil decisión para sus animales. De acuerdo con el Diario de Yucatán, la gente que conocía al señor, siempre se preocupaba por sus perros, pues tenía miedo de dejarlos sólos.
El reporte de la Policía Municipal, que cita el diario, detalla que Mauricio era soltero y vivía con un hermano menor. El abuelito era muy conocido en su población, por lo que la noticia de su suicidio conmocionó a la localidad, porque, según contaron, vivía por sus perros a quienes los cuidaba con amor.
El señor de la tercera edad murió acostado en su hamaca con sus perros alrededor y dejó una carta póstuma en donde pidió perdón a su hermano y pidió “que no culpe a nadie” de su muerte, pero su última voluntad fue que un amigo le diera sepultura a sus perros en el terreno donde vivía.