En Filipinas la historia del niño de 11 años, Rommen Quemeles y la de su perro "Badgi" se ha hecho tendencia por la manera en la que viven los dos en este país.
Y es que el pequeño y el adorable perrito viven en situación de calle, en donde duermen en las banquetas, se alimentan de mala manera y sufren de violencia, pero los dos a pesar de todo se han mantenido juntos.
En internet hay un video en donde se pueden ver las actividades de Rommen en donde vende dulces para sobrevivir y de paso alimentar a su querido perro "Badgi".
En este se cuenta la historia de ambos en donde Rommen Quemeles se separó de sus padres cuando estos se divorciaron. Él quedó a cargo de su hermana mayor, quien vive en una zona muy cercana en donde deambula en las calles.
Asociaciones civiles quieren ayudarlos.
Pero Rommen acusa que los policías lo golpean y lo acusan de delitos, en ocasiones le roban lo que se gana en sus dulces.
Esta historia se dio a conocer por la fotógrafa Maria Kabs, quien captó a los dos durmiendo en una calle de Filipinas. Estas imágenes causaron indignación entre la gente y usuarios en redes sociales.
Muchas asociaciones civiles se han acercado a Rommel para ayudarlo junto con su perro “Badgi”, el cual es su amigo más inseparable. Además de ser su única familia.