El líder militar de Myanmar prometió el día de hoy que iba a organizar nuevas elecciones y entregar el poder al ganador pacíficamente. El compromiso se dio en un contexto en el que decenas de miles se reúnen en las calles para protestar contra el golpe militar que sacó del poder el gobierno civil de Aung San Suu Kyi's. Según información que reportó Reuters.
El general Min Aung Hlaing se dirigió a la nación en un mensaje televisado, el primero desde el golpe militar. No especificó cuándo se llevaría a cabo la elección, pero volvió a calificar la victoria de Suu Kyi's en la elección del pasado noviembre como fraudulenta.
En Naipyidó, capital del país, multitudes de manifestantes con carteles contra el golpe le gritaron a los policías que su deber es servir a la población en vez de a la cúpula militar.
Las autoridades policiales los rociaron con chorros de agua y los amenazaron con abrir fuego si no se dispersaban, así lo hicieron y afortunadamente no hubo bajas civiles ni lesionados.
A diferencia de otras épocas, las marchas han sido pacificas en esta oportunidad, considerando que tanto en las desarrolladas en 1988 y 2007, murieron cientos de protestantes.