Son miles de personas las que sufren depresión a nivel mundial y con el encierro al que muchos nos tuvimos que someter debido a la pandemia, los casos se dispararon aún más. Pues resulta que unos investigadores de la Universidad de California, Estados Unidos, lograron a través de un implante cerebral aliviar los síntomas que produce la depresión.
La persona con la que realizaron las pruebas se llama Sarah y tiene 36 años; la mujer había sufrido depresión severa durante varios años.
¿Cómo lo lograron?
Los científicos implantaron temporalmente a la mujer electrodos de alambre delgado en su cerebro, con ellos pudieron monitorear la actividad cerebral. Luego de algún tiempo detectaron en su amígdala una onda cerebral llamada onda gamma que estaba involucrada con sus emociones.
Implante personalizado
Luego de detectar la onda gamma, los investigadores crearon un implante hecho a la medida, basándose en la estimulación profunda, así que nuevamente lograron detectar un área estrechamente conectada, se trataba del estriado ventral, en donde una pequeña dosis de electricidad tenía un impacto inmediato y profundo.
El procedimiento utilizó comunicación eléctrica entre un electrodo con varios puntos de contacto implantado en el cerebro y un generador de impulsos programable implantado debajo de la piel.
De acuerdo con la revista Nature Medicine, los electrodos implantados enviaron impulsos eléctricos a otras estructuras implantadas y fue así como la estimulación de alta frecuencia en el área objetivo del cerebro logró bloquear las señales que causaban los síntomas de la depresión.
Luego del tratamiento, Sarah mostró una "mejora rápida y sostenida".
¿Cuánto cuesta este tratamiento?
El dispositivo personalizado cuesta alrededor de 35 mil dólares (aproximadamente 720 mil pesos mexicanos) y es una versión adaptada de uno que se usa normalmente para tratar la epilepsia, llamado NeuroPace RNS System.
Se espera que en un futuro este implante pueda curar a más pacientes con depresión severa.
