Las cabelleras dañadas, sin brillo, con exceso de frizz y propensas a la caída y el quiebre son el resultado de malos hábitos capilares que solemos llevar a cabo sin siquiera ser conscientes de ello.
Para mantener una melena saludable y radiante, es fundamental reconocer las señales de que algo no va bien y tomar medidas para cuidar adecuadamente nuestro cabello.
Identificar y corregir estas malas prácticas es esencial para mantener una buena salud capilar. Con pequeños cambios en tu rutina y cuidados adecuados, podrás tener un cabello hermoso y lleno de vitalidad.
Errores que están dañando tu pelo
Estos son siete de los malos hábitos capilares más comunes que debes evitar:
- Usar productos incorrectos: Cada tipo de melena tiene necesidades específicas, por lo que el uso de productos inadecuados puede interferir con su apariencia. Asegúrate de utilizar productos destinados a tu tipo de cabello y necesidades específicas, evitando el uso de mascarillas o tratamientos que no sean adecuados para ti.
- Lavarlo con agua demasiado caliente: Las duchas calientes pueden ser relajantes, pero el agua caliente puede irritar el cuero cabelludo, debilitar la estructura capilar y deshidratar el cabello. Opta por lavar tu cabello con agua tibia o fría para evitar estos efectos negativos.
- Exponerlo excesivamente al sol: Al igual que la piel, el cabello también sufre daños por la exposición excesiva al sol. La radiación UV puede causar pérdida de brillo, alteraciones en el color, deshidratación y quiebre. Siempre que vayas a estar expuesto al sol por largos periodos, utiliza un protector solar capilar o cubre tu cabello con un sombrero.
- Aplicar calor sin protección: El uso frecuente de herramientas de calor, como secadoras, planchas y tenazas, puede dañarte. Las altas temperaturas queman la cutícula protectora, dejando el cabello seco, sin brillo y quebradizo. Disminuye el uso de estas herramientas y siempre aplica un producto termoprotector antes de usar calor.
- Tener una rutina de secado y cepillado inadecuada: La forma en que te secas y cepillas puede afectar su salud. Opta por usar toallas de microfibra para secar el cabello y elimina el exceso de agua suavemente. Utiliza un cepillo adecuado para tu tipo y evita amarrarlo cuando esté mojado para evitar quiebres.
- No despuntarlo periódicamente: Muchas personas evitan cortar su cabello con la creencia de que afectará su crecimiento, pero el no despuntarlo puede llevar a puntas abiertas y orzuela. Cortarlo regularmente elimina las puntas dañadas y ayuda a mantener una melena saludable y densa.
- No darle un periodo de “detox”: El uso excesivo de productos capilares puede debilitar la estructura y desequilibrar los microbios que lo protegen. De vez en cuando, dale a tu cabello un descanso de los tratamientos y utiliza solo shampoo y acondicionador. Evita el uso de fijadores, cremas para peinar y ceras durante estos periodos.
