Los hábitos de limpieza son necesarios para tener nuestra casa libre de microorganismos que pueden llevarnos a enfermar. Aunado a esto, un hogar aseado trae beneficios para la salud mental pues da la sensación de tranquilidad y armonía, sumando que te hará sentir incluso más feliz y con menos estrés.
Pero hay lugares en la casa que deben tener mucho más cuidado, uno de ellos es el baño, ya que por el uso que se le da es una buena fuente de infecciones y enfermedades si no se mantiene la higiene adecuada. Pues la acumulación de desechos personales y fluidos corporales pueden transmitir enfermedades infecciosas, como el SARS-CoV-2, la influenza y el norovirus.
Es bien sabido que en el inodoro hay mayor formación de gérmenes por los desechos vertidos ahí, e incluso el agua que puede salpicarse también lleva bacterias; es por eso que debe garantizarse su sanidad y con ello que no se formen microorganismos dañinos y lavarlo con frecuencia evitará esas acumulaciones.
Con esta frecuencia debes lavar tu baño
Lo más recomendable para evitar enfermedades es que laves tu baño una vez a la semana, de acuerdo con la doctora Kelly Reynolds, investigadora del Exposure Science and Risk Assessment Center (ESRAC) en la universidad de Arizona, quien asegura que con eso se garantiza que se alejen los microorganismos que te pueden enfermar como las bacterias, hongos y virus.
Para que sea efectiva la higiene se debe lavar todo el baño, desde el aseo de las paredes, el lavabo, los pisos, las llaves del lavabo, de la regadera, la taza y el piso.
Así como cambiar las cortinas de baño y toallas de las manos también una vez a la semana. Usa productos especiales para desmanchar o bien aplica algunos remedios caseros para quitar manchas difíciles.
